A pocos kilómetros de Briviesca, capital de la Bureba, se encuentra el pequeño pueblo de Valdazo. La iglesia de este pueblo es una de las más originales de la Bureba y de las más complejas, con la virtud adicional de conservarse completa y sin excesivos añadidos.
Se trata de una construcción románica de una nave con ábside y torre sobre el crucero. Al sur se levanta la portada, de grandes dimensiones, cubierta por un pórtico gótico temprano que se integra perfectamente en el conjunto. Al norte, un amplio espacio moderno hace las veces de almacén; y un compartimento menor, de sacristía. Sobre el crucero, como en otras iglesias de la provincia de Burgos (San Quirce, San Pedro de Tejada, Monasterio de Rodilla...), se levanta una torre, también románica. El conjunto es una construcción de calidad, abovedada por completo y de buena sillería.
Valdazo. Portada y pórtico
El ábside es típico de los edificios de la Bureba, con triples columnas (al estilo de lo visto en Soto de Bureba, Los Barrios o Navas de Bureba) que le dan un toque de solidez y de elegancia. Su escultura, como la del resto de la iglesia, es tosca y esquemática.
Valdazo. Ábside
Lo que diferencia a esta iglesia es su torre. La colocación de esta sobre el crucero no es novedosa, pero sí lo es la forma de hacerlo. En vez de sostenerse al interior por una bóveda de arista o una cúpula, lo hace por un estrechamiento sensible de la nave, abovedado con cañón, cerrado por dos arcos que encajan mal, por su situación y proporciones, con el resto del edificio. A ambos lados de esta angostura se abren pequeños espacios por uno de los cuales se accedía en otros tiempos a los pisos superiores de la torre (estos espacios son en sí mismos curiosos y recuerdan a otras iglesias con templetes laterales como las de Siones y Monasterio de Rodilla). Por otra parte, la propia torre parece, por su construcción y por el tamaño de los sillares, bastante más antigua que el resto del edificio; quizá del siglo XI. Cómo se llego a esta disposición es un enigma. Una posibilidad es que la torre y el estrechamiento que la soporta pertenecieran en su momento a una iglesia menor, y al ensanchar esta con la construcción de la actual no fuera posible modificarlos, quedando incrustados en la estructura posterior.
Valdazo. Torre
Valdazo. Torre. Detalle del soporte interior
En cuanto a la escultura, es, como ya se ha dicho, poco elaborada; pero se pueden destacar un capitel del interior de la nave en el que aparecen tres personajes separados por grandes hojas; algunos canecillos, que muestran máscaras; una ménsula con forma de león en uno de los edículos a los pies de la torre; y, en un capitel de la propia torre, una figura humana con los brazos extendidos.
Valdazo. Capitel de la nave
Desde luego, es una iglesia que merece, a pesar de lo que se contará en el artículo siguiente, una visita y una observación detenida.